“El daño psíquico es cualquier agresión violenta de naturaleza física o psíquica, que al impactar sobre la psiquis de la víctima puede causar una perturbación psiquiátrica o psicológica”. Con esta definición, el Dr. Rodrigo Dresdner, perito forense del Servicio Médico Legal y docente del programa de postgrado en Psicodiagnóstico y Psicoterapia de la Facultad de Psicología de la Universidad del Desarrollo, inició la conferencia “Evaluación de daño en víctimas de delitos violentos”, la cual reunió tanto a alumnos de la carrera como a especialistas interesados en esta materia.

El experto explicó paso por paso la confección del informe de evaluación, el que comienza tras la solicitud de un fiscal, quien realiza una pregunta médicolegal, que debe ser contestada por el perito tras analizar el caso y entrevistarse con la víctima.

Para Dresdner, la evaluación de daño psíquico es precisa cuando el fiscal observa que la víctima debe ser examinada por un profesional competente porque “existe presencia de un cuadro o síndrome clínico o psicopatológico que causa una perturbación del psiquismo, que irrumpe novedosamente en la biografía del sujeto y que presenta un nexo de causalidad con un agente traumático suficientemente poderoso como para causar una lesión psíquica”.

Durante la conferencia, Dresdner recalcó la necesidad de que el psicólogo o psiquiatra sea capaz de alejarse de la mirada clínica y analizar el caso desde el ámbito forense. “Debemos cambiar el switch y pensar que ya no estamos como psicólogos o psiquiatras clínicos, sino como forenses. Lo que interesa es el daño moral, porque el juez no se interesa por la afectación o similares”, señaló el médico.

“El perito aporta un elemento más en todas las pruebas que se presentan en el juicio, por lo que debe ser lo más objetivo posible en su proceder (…) nosotros no hacemos justicia, solo respondemos la pregunta médicolegal”, concluyó Dresdner.